El afecto ilustrado

El Afecto Ilustrado ofrece en 'Sol del Sur' una lectura fresca y colorista de los quintetos con guitarra del compositor italiano Luigi Boccherini (1743-1805). Un fiel reflejo de la sociedad madrileña de finales del XVIII y de toda la luz encantadora que, a modo de catálogo, encierra esta colección camerística. Con una década de actividad a sus espaldas es, a día de hoy, uno de los grupos musicales historicistas más longevos y mejor consolidados del Archipiélago Canario. Además, integrante de GEMA, Asociación de Grupos Españoles de Música Antigua. 

Con motivo de su décimo aniversario, El Afecto Ilustrado ha realizado, como segundo trabajo discográfico, un monográfico de los Quintetos de cuerda con dos violas de José Palomino (1753-1810) para el sello especializado en música antigua y barroca Lindoro, que incluye y recupera varias obras registradas de forma sonora por primera vez. Su concertino y director, Adrián Linares, ha recibido el Premio Excellens de Música 2020 de la Real Academia Canaria de Bellas Artes en reconocimiento a su labor de investigación, interpretación y difusión de la Música Antigua en el Archipiélago Canario.

Luigi Boccherini nacido en Lucca, pronto demuestra grandes dotes para el violonchelo, estudiando en Roma bajo la tutela de Giovanni Battista Constanzi. Acabados sus estudios, viaja por Europa como reputado instrumentista y compositor, hasta que en 1768 se traslada a Madrid, trabajando bajo la protección del Infante Don Luis Antonio de Borbón y Farnesio, hermano pequeño de Carlos III. En España trabaja entre 1768 y 1769 en la compañía de teatro de los Reales Sitios, hasta que en 1770 entra a formar parte de la Capilla Real del Infante Don Luis. A partir de este momento, Boccherini producirá una ingente cantidad de música de cámara, que ni siquiera decae cuando se retira a Arenas de San Pedro siguiendo al Infante Don Luis, gracias a sus contactos con las principales editoriales europeas. 

A la muerte de éste, y también de su primera esposa, Boccherini se traslada a Madrid, ingresando en la Real Capilla de Carlos III, y poco después, en 1786 entra a trabajar al servicio de la Casa de Osuna y Benavente. El mismo año es nombrado compositor de la Corte de Federico Guillermo II de Prusia. Cuando éste muere en 1797, y la Casa de Osuna retira su mecenazgo, Boccherini comienza un período de decadencia vital que acabará en 1805, cuando muere en Madrid. 

Es bien sabido que la llegada del violonchelista y compositor a la Villa y Corte en 1768 supuso una enorme absorción de estilos y estéticas en el plano compositivo que había ya empezado anteriormente con figuras como la de Francesco Corselli (1705-1778). La música en España, al igual que otras artes, miraba hacia Italia por razones políticas, y la influencia del país itálico será una constante hasta finales del siglo XVIII. Los quintetos con guitarra, que datan del último cuarto de la centuria, son una parte fascinante de su obra, y constituyen un muestrario de sonoridades únicas, impregnado de un espíritu ilustrado ibérico luminoso y vitalista. 

La conjunción de la guitarra con una estructura de cuarteto clásico permite al instrumento solista alternar momentos de brillo con otros de acompañamiento, en los que la escritura, que combina lirismo y virtuosismo a partes iguales, hace gala del buen conocimiento del instrumento por parte del autor. La armonía en los quintetos es luminosa y elegante, rasgo típicamente boccheriniano, y alterna momentos mayores de gran sentido festivo con otros en tonos menores profundamente melancólicos, que sin ser propiamente románticos, anuncian ya la inminente llegada del Sturm und Drang.